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Frases Bíblicas: citas y versículos de vida, amor, fé, amistad y gratitud

Actualizado 2 marzo, 2022

Educar en valores a los niños tan imprescindibles y necesarios hoy en día como son la honradez, el respeto, la responsabilidad, la amabilidad será mucho más sencillo si nos valemos de recursos como los proverbios cristianos.

Como buenos católicos nos gusta disfrutar de unas buenas citas de La Biblia para reflexionar sobre la vida o el amor. En la Biblia puedes encontrar todo tipo de mensajes y citas de gran belleza, no por nada en ella se encuentra la Palabra de Dios.

Es por ello que en éste post encontrarás una gran variedad de informción sobre frases bíblicas, para poder compartir con tus allegados y familiares.

Frases Bíblicas para niños

En el principio creó Dios los cielos y la tierra (Ge 1:1).

Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se prolonguen sobre la tierra que el señor tu Dios te da (Éx 20:12).

En paz me acostaré y dormiré; porque solo tú, oh señor, me haces vivir confiado (Sal 4:8).

El señor es mi pastor; nada me faltará (Sal 23:1).

Bendeciré al señor en todo tiempo; su alabanza estará siempre en mi boca (Sal 34:1).

El ángel del señor acampa alrededor de los que le temen, y los defiende (Sal 34:7).

Al anochecer, al amanecer y al mediodía oraré y clamaré; y él oirá mi voz (Sal 55:17).

Lámpara es a mis pies tu palabra y lumbrera a mi camino (Sal 119:105).

El principio de la sabiduría es el temor del Señor (Pr 1:7).

Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él emana la vida (Pr 4:23).

El hijo sabio alegra a su padre, pero el hijo necio es tristeza de su madre (Pr 10:1).

Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él (Pr 22:6 ).

Vengan a mí, todos los que están fatigados y cargados, y yo los haré descansar (Mt 11:28).

Entonces Jesús les dijo: Dejen a los niños y no les impidan venir a mí, porque de los tales es el reino de los cielos (Mt 19:14).

Todo lo que pidan en oración, creyendo, lo recibirán (Mt 21:22).

Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente (Mt 22:37).

Amarás a tu prójimo como a ti mismo (Mt 22:39).

Y como quieren que hagan los hombres con ustedes, así también hagan ustedes con ellos (Lc 6:31).

Bienaventurados son los que oyen la palabra de Dios y la guardan (Lc 11:28).

Pero a todos los que lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio derecho de ser hechos hijos de Dios (Jn 1:12).

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna (Jn 3:16).

Y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres (Jn 8:32).

Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mí (Jn 14:6).

Cree en el Señor Jesús y serás salvo, tú y tu casa (Hch 16:31).

Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios (Ro 10:17).

Todas sus cosas sean hechas con amor (1 Co 16:14).

¡Todo lo puedo en Cristo que me fortalece! (Filip 4:13).

Hijos, obedezcan en el Señor a sus padres, porque esto es justo (Ef 6:1).

El que no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es amor (1 Jn 4:8).

Citas Bíblicas sobre la vida

Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino eterno (Sal 139:23-24).

Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna y otros para vergüenza y eterno horror (Da 12:2).

Y todo aquel que deje casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o campos por causa de mi nombre, recibirá cien veces más y heredará la vida eterna (Mt 19:29).

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito para que todo aquel que en él cree no se pierda mas tenga vida eterna (Jn 3:16).

El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que desobedece al Hijo no verá la vida sino que la ira de Dios permanece sobre él (Jn 3:36).

Pero cualquiera que beba del agua que yo le daré, nunca más tendrá sed sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna (Jn 4:14).

De cierto, de cierto les digo que el que oye mi palabra y cree al que me envió tiene vida eterna. El tal no viene a condenación sino que ha pasado de muerte a vida (Jn 5:24).

Escudriñen las Escrituras, porque les parece que en ellas tienen vida eterna y ellas son las que dan testimonio de mí (Jn 5:39).

Trabajen, no por la comida que perece sino por la comida que permanece para vida eterna que el Hijo del Hombre les dará; porque en este, Dios el Padre ha puesto su sello (Jn 6:27).

Esta es la voluntad de mi Padre: que todo aquel que mira al Hijo y cree en él tenga vida eterna, y que yo lo resucite en el día final (Jn 6:40).

De cierto, de cierto les digo: El que cree tiene vida eterna (Jn 6:47).

El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el día final (Jn 6:54).

Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna (Jn 6:68).

El que ama su vida la pierde; pero el que odia su vida en este mundo, para vida eterna la guardará (Jn 12:25).

Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo a quien tú has enviado (Jn 17:3).

Vida eterna a los que por su perseverancia en las buenas obras buscan gloria, honra e incorrupción; pero enojo e ira a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad sino que obedecen a la injusticia (Ro 2:7-8).

La ley entró para agrandar la ofensa, pero en cuanto se agrandó el pecado sobreabundó la gracia para que, así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la justicia para vida eterna por medio de Jesucristo nuestro Señor (Ro 5:20-21).

Pero ahora, libres del pecado y hechos siervos de Dios, tienen como su recompensa la santificación y, al fin, la vida eterna (Ro 6:22).

Porque la paga del pecado es muerte; pero el don de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro (Ro 6:23).

Porque el que siembra para su carne, de la carne cosechará corrupción; pero el que siembra para el Espíritu, del Espíritu cosechará vida eterna (Gá 6:8).

Fiel es esta palabra: Si morimos con él, también viviremos con él (2 Ti 2:11).

Y esto para que, justificados por su gracia, seamos hechos herederos conforme a la esperanza de la vida eterna (Tit 3:7).

La vida fue manifestada, y la hemos visto; y les testificamos y anunciamos la vida eterna que estaba con el Padre y nos fue manifestada (1 Jn 1:2).

Y esta es la promesa que él nos ha hecho: la vida eterna (1 Jn 2:25).

Todo aquel que odia a su hermano es homicida, y ustedes saben que ningún homicida tiene vida eterna permaneciendo en él (1 Jn 3:15).

Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna, y esta vida está en su Hijo (1 Jn 5:11).

Estas cosas les he escrito a ustedes que creen en el nombre del Hijo de Dios para que sepan que tienen vida eterna (1 Jn 5:13).

No obstante, sabemos que el Hijo de Dios está presente y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios y la vida eterna (1 Jn 5:20).

Consérvense en el amor de Dios, aguardando con esperanza la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para vida eterna (Judas 1:21).

Frases Bíblicas sobre el amor

Te alabaré con himnos… pues tu amor es más grande que los cielos (Salmos, 108:4).

Mi amado es para mí como el saquito de mirra (Cantares, 1:13).

¡Reanímenme con tortas de pasas, aliméntenme con manzanas, porque me muero de amor! ¡Que ponga él su izquierda bajo mi cabeza, y que con su derecha me abrace! (Cantares, 2:5-6).

A cambio de ti entregaré hombres; ¡a cambio de tu vida entregaré pueblos! Porque te amo y eres ante mis ojos precioso y digno de honra (Isaías, 43:4).

Llévame grabada en tu corazón, ¡llévame grabada en tu brazo! El amor es inquebrantable como la muerte; la pasión, inflexible como el sepulcro (Cantares, 7:6).

¡Tus ojos son dos palomas! (Cantares, 1:15).

¡Qué hermoso eres, amor mío, qué hermoso eres! (Cantares, 1:16).

Mi amado es mío y yo soy suya (Cantares, 2:16).

Mujeres de Jerusalén, si encuentran a mi amado, prométanme decirle que me estoy muriendo de amor (Cantares, 5:8).

Sírvanse los unos a los otros por amor. Porque toda la ley se resume en este solo mandato: “Ama a tu prójimo como a ti mismo” (Gálatas, 5:13-14).

A los ojos de él, ya he encontrado la felicidad (Cantares, 8:10).

Mientras llega el día y huyen las sombras, vuelve, amado mío; sé como un venado, como un venado pequeño por los montes escarpados (Cantares, 2:17).

Me robaste el corazón con una sola mirada tuya (Cantares, 4:9).

Yo dormía, pero no mi corazón. Y oí que mi amado llamaba a la puerta (Cantares, 5:2).

Amados, amémonos unos a otros, porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, ha nacido de Dios y conoce a Dios (1 Juan, 4:7-8).

El hombre deja a su padre y a su madre para unirse a su esposa, y los dos llegan a ser como una sola persona (Génesis, 2:24).

Revístanse de amor, que es el lazo de la perfecta unión. Y que la paz de Cristo reine en sus corazones, porque con este propósito los llamó Dios a formar un solo cuerpo (Colosenses, 3:14-15).

Las esposas deben estar sujetas a sus esposos como al Señor (Efesios, 5:22).

En la intimidad de tu hogar, tu mujer será como una vid cargada de uvas; tus hijos, alrededor de tu mesa, serán como retoños de olivo. Así bendecirá el Señor al hombre que lo honra (Salmos, 128:3-4).

La mujer ejemplar hace de su marido un rey (Proverbios, 12:4).

Deben los esposos amar a sus esposas como a su propio cuerpo. El que ama a su esposa, se ama a sí mismo. Porque nadie odia su propio cuerpo, sino que lo alimenta y lo cuida, como Cristo hace con la iglesia, porque ella es su cuerpo (Efesios, 5:28-29).

Encontrar una esposa es encontrar lo mejor: es recibir una muestra del favor de Dios (Proverbios, 18:22).

Hay tres cosas, y hasta cuatro, que me asombran y no alcanzo a comprender: el camino del águila en el cielo, el camino de la víbora en las rocas, el camino de un barco en alta mar y el camino del hombre en la mujer (Proverbios, 30:19)

Que cada uno de ustedes ame a su esposa como a sí mismo, y que la esposa respete al esposo (Efesios, 5:33).

¡Dichoso el esposo de una mujer buena: vivirá el doble! (Eclesiástico, 26:1).

Una mujer ejemplar hace prosperar a su marido y le alegra los años de su vida (Eclesiástico, 26:2).

Más valen dos que uno, pues trabajando unidos les va mejor a ambos. Si uno cae, el otro lo levanta. En cambio, al que está solo le va muy mal cuando cae porque no hay quien lo ayude. Si dos se acuestan juntos, se darán calor, pero si alguien duerme solo, no habrá quién lo caliente. Uno solo puede ser vencido, pero dos se defienden mejor. Es que la cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente (Eclesiástico, 4:9-12).

Mujer ejemplar no es fácil hallarla; ¡vale más que las piedras preciosas! Su esposo confía plenamente en ella, y nunca le faltan ganancias (Proverbios, 31:10-11).

Volví a pasar junto a ti, y te miré; estabas ya en la edad del amor. Extendí mi manto sobre ti, y cubrí tu cuerpo desnudo, y me comprometí contigo; hice una alianza contigo (Ezequiel l, 16:8).

Si tienes esposa, quiérela (Eclesiástico, 7:26).

Esposos, amen a sus esposas y no las traten con aspereza (Colosenses, 3:19).

El esposo es cabeza de la esposa, como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo; y él es también su Salvador (Efesios, 5:23).

Así como la iglesia está sujeta a Cristo, también las esposas deben estar sujetas en todo a sus esposos (Efesios, 5:24).

Hay tres cosas que me gustan y que agradan a Dios y a los hombres: la concordia entre los hermanos, la amistad entre los vecinos y la armonía entre los esposos (Eclesiástico, 25:1).

Citas Bíblicas de amistad

El atribulado es consolado por su compañero; Aun aquel que abandona el temor del Omnipotente (Job 4:14).

¡He aquí, cuán bueno y cuán agradable es que los hermanos habiten juntos en armonía! (Sal 133:1).

El justo sirve de guía a su prójimo, pero la conducta de los impíos los hace errar (Pr 12:26).

El que anda con los sabios se hará sabio, pero el que se junta con los necios sufrirá daño (Pr 13:20).

El hombre perverso levanta contienda, Y el chismoso aparta a los mejores amigos (Pr 16:28).

El que perdona la ofensa cultiva el amor; el que insiste en la ofensa divide a los amigos (Pr 17:9) Versión NVI.

En todo tiempo ama el amigo, Y es como un hermano en tiempo de angustia (Pr 17:17).

Hay amigos que uno tiene para su propio mal, pero hay un amigo que es más fiel que un hermano (Pr 18:24).

El rey ama al de corazón puro, y el que tiene gracia de labios será su amigo (Pr 22:11).

Fieles son las heridas que causa el que ama, pero engañosos son los besos del que aborrece (Pr 27:6).

El aceite y el perfume alegran el corazón; y la dulzura de un amigo más que el consejo del alma (Pr 27:9).

Mejor dos que uno solo, pues tienen mejor recompensa por su trabajo. Porque si caen, el uno levantará a su compañero. Pero, ¡ay del que cae cuando no hay otro que lo levante! (Ec 4:9-10).

Y como quieren que hagan los hombres con ustedes, así también hagan ustedes con ellos (Lc 6:31).

Nadie tiene mayor amor que este: que uno ponga su vida por sus amigos (Jn 15:13).

No se dejen engañar: “Las malas compañías corrompen las buenas costumbres” (1 Co 15:33).

¡Gente adúltera! ¿No saben que la amistad con el mundo es enemistad con Dios? Por tanto, cualquiera que quiere ser amigo del mundo se constituye enemigo de Dios (Stg 4:4).

Amados, amémonos unos a otros, porque el amor es de Dios. Y todo aquel que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios (1 Jn 4:7).

Y tenemos este mandamiento de parte de él: El que ama a Dios ame también a su hermano (1 Jn 4:21).

Y se cumplió la Escritura que dice: Y creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia; y fue llamado amigo de Dios (Stg 2:23).

Entonces el señorhablaba a Moisés cara a cara, como habla un hombre con su amigo. Después regresaba Moisés al campamento; pero el joven Josué hijo de Nun, su ayudante, no se apartaba de la tienda (Ex 33:11).

¿Acaso no me llamas ahora: ‘Padre mío’, o ‘Tú eres el amigo de mi juventud’? (Jr 3:4).

Le preguntarán: ‘¿Qué heridas son estas en tus manos?’. Y él responderá: ‘Con ellas fui herido en la casa de mis amigos’ (Zac 13:6).

Habiendo dicho estas cosas, después les dijo: Nuestro amigo Lázaro duerme pero voy para despertarlo (Jn 11:11).

Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando. Ya no los llamo más siervos porque el siervo no sabe lo que hace su señor. Pero los he llamado amigos porque les he dado a conocer todas las cosas que oí de mi Padre (Jn 15:14-15).

He aquí, tu cuñada se ha vuelto a su pueblo y a sus dioses. Vuélvete tú tras ella. Pero Rut respondió: No me ruegues que te deje y que me aparte de ti; porque a dondequiera que tú vayas, yo iré; y dondequiera que tú vivas, yo viviré. Tu pueblo será mi pueblo y tu Dios será mi Dios. Donde tú mueras, yo moriré; y allí seré sepultada. Así me haga el SEÑOR y aun me añada, que solo la muerte hará separación entre tú y yo. Viendo Noemí que Rut estaba tan resuelta a ir con ella, no le dijo nada más (Rut 1:15-18).

Aconteció que cuando David terminó de hablar con Saúl, el alma de Jonatán se quedó ligada a la de David, y Jonatán lo amó como a sí mismo. Aquel día Saúl lo retuvo y no lo dejó volver a la casa de su padre. Entonces Jonatán hizo un pacto con David, porque lo amaba como a sí mismo. Y Jonatán se quitó la túnica que llevaba y se la dio a David, junto con otras prendas suyas, inclusive su espada, su arco y su cinturón (1 Sa 18:1-4).

Me he acordado de tus lágrimas y deseo verte para ser lleno de gozo (1 Ti 1:4).

Versículos Bíblicos de fé y esperanza

Romanos 5: 5 – Y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios se derrama en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos es dado.

Y sabemos que todas las cosas funcionan juntas para bien de los que aman a Dios, a los que son llamados según su propósito. Romanos 8:28

Romanos 12:12 – Regocijándose en la esperanza; paciente en tribulación; continuando instantáneamente en oración.

Gálatas 5: 5 – Porque nosotros por el Espíritu esperamos la esperanza de la justicia por la fe.

Salmos 71:14 – Pero esperaré continuamente, y aún te alabaré más y más.

Proverbios 23:18 – Porque seguramente hay un final, y tu expectativa no será cortada.

Hebreos 11: 1 – Ahora la fe es la sustancia de las cosas que se esperan, la evidencia de las cosas que no se ven.

Romanos 8:25 – Pero si esperamos lo que no vemos, entonces ¿con paciencia lo esperamos?

Salmos 71: 5 – Porque tú [eres] mi esperanza, oh Señor DIOS: tú eres mi confianza desde mi juventud.

Timoteo 6:17 – Encarguen a los que son ricos en este mundo, que no sean de mente elevada, ni confíen en riquezas inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da ricamente todas las cosas para disfrutar;

Hebreos 6:11 – Y deseamos que cada uno de ustedes muestre la misma diligencia para la plena seguridad de la esperanza hasta el final.

Que esperanza tenemos como un ancla del alma, segura y firme, y que entra en eso dentro del velo. Hebreos 6:19

Pedro 1:13 – ¿Por qué ceñir los lomos de tu mente, estar sobrio y esperar hasta el final por la gracia que te será traída en la revelación de Jesucristo.

Proverbios 10:28 – La esperanza de los justos será alegría: pero la expectativa de los impíos perecerá.

Marcos 9:23 – Jesús le dijo: Si puedes creer, todas las cosas son posibles para el que cree.

Proverbios 13:12 – La esperanza diferida enferma el corazón: pero cuando viene el deseo, es un árbol de la vida.

Isaías 41:10 – No temas; porque yo estoy contigo: no te desanimes; porque yo soy tu Dios: te fortaleceré; sí, te ayudaré; sí, te sostendré con la diestra de mi justicia.

Jeremías 17: 7 – Bienaventurado el hombre que confía en el señor, y cuya esperanza es el señor.

Job 11:18 – Y estarás seguro porque hay esperanza; sí, cavarás sobre ti y descansarás con seguridad.

Salmos 31:24 – Ten valor, y él fortalecerá tu corazón, todos los que esperan en el señor.

Salmos 33:20 – Nuestra alma espera al Señor: él es nuestra ayuda y nuestro escudo.

Salmos 39: 7 – Y ahora, Señor, ¿qué espero? Mi esperanza está en ti.

Ahora al que es capaz de hacer mucho más de lo que pedimos o pensamos, de acuerdo con el poder que obra en nosotros. Efesios 3:20

Colosenses 1:27 – A quien Dios haría saber cuáles son las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en ti, la esperanza de gloria.

Tesalonicenses 1: 3 – Recordando sin cesar tu obra de fe, trabajo de amor y paciencia de esperanza en nuestro Señor Jesucristo, a la vista de Dios y de nuestro Padre.

Pedro 3:15 – Pero santifica al Señor Dios en tus corazones: y prepárate siempre para dar una respuesta a cada hombre que te pida una razón de la esperanza que hay en ti con mansedumbre y temor:

Corintios 3:12 – Al ver entonces que tenemos tanta esperanza, usamos una gran sencillez de expresión

Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad y la vida: nadie viene al Padre sino por mí. Juan 14: 6

Salmos 38:15 – Porque en ti, oh señor, espero: oirás, Señor mi Dios.

Frases Bíblicas de gratitud

Cuando ofrezcan al señor un sacrificio de acción de gracias, lo sacrificarán de manera que les sea aceptado (Lev 22:29).

¡Alaben al señor, porque es bueno; porque para siempre es su misericordia! (1 Cr 16:34)

Lavaré mis manos en inocencia e iré alrededor de tu altar, oh señor, para proclamar con voz de agradecimiento y contar todas tus maravillas (Sal 26:6-7).

¡Gracias te damos, oh Dios; te damos gracias! Porque cercano está tu nombre; se cuenta de tus maravillas (Sal 75:1).

Bueno es alabar al señor, cantar salmos a tu nombre, oh Altísimo (Sal 92:1).

Este es el día que hizo el señor; nos gozaremos y nos alegraremos en él (Sal 118:24).

Cuando Daniel supo que el documento estaba firmado entró en su casa y, con las ventanas de su cámara abiertas hacia Jerusalén, se hincaba de rodillas tres veces al día. Y oraba y daba gracias a su Dios, como lo solía hacer antes (Da 6:10).

Tomó los siete panes y los pescaditos, y habiendo dado gracias los partió e iba dando a los discípulos, y los discípulos a las multitudes (Mt 15:36).

Tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio diciendo: Beban de ella todos (Mt 26:27).

ntonces uno de ellos, al ver que había sido sanado, volvió glorificando a Dios en alta voz. Y se postró sobre su rostro a los pies de Jesús dándole gracias. Y este era samaritano (Lucas 17:15-16).

Luego quitaron la piedra, y Jesús alzó los ojos arriba y dijo: Padre, te doy gracias porque me oíste (Jn 11:41).

Primeramente, doy gracias a mi Dios por medio de Jesucristo con respecto a todos ustedes, porque su fe es proclamada en todo el mundo (Ro 1:8).

Pero gracias a Dios, quien nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo (1 Co 15:57).

Por nada estén afanosos; más bien, presenten sus peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias (Fil 4:6).

firmemente arraigados y sobreedificados en él, y confirmados por la fe así como han sido enseñados, abundando en acciones de gracias (Col 2:7).

Y la paz de Cristo gobierne en su corazón, pues a ella fueron llamados en un solo cuerpo, y sean agradecidos (Col 3:15).

Y todo lo que hagan, sea de palabra o de hecho, háganlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él (Col 3:17).

Perseveren siempre en la oración, vigilando en ella con acción de gracias (Col 4:2).

Doy gracias al que me fortaleció, a Cristo Jesús nuestro Señor, porque me tuvo por fiel al ponerme en el ministerio (1 Timoteo 1:12).

Den gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para ustedes en Cristo Jesús (1 Tes 5:18).

Y siempre que aquellos seres vivientes dan gloria y honra y acción de gracias al que está sentado en el trono, al que vive por los siglos de los siglos (Ap 4:9).

Versículos Bíblicos sobre el perdón

Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad. Marcos 11:25

No ha hecho con nosotros conforme a nuestras iniquidades, ni nos ha pagado conforme a nuestros pecados. Porque como la altura de los cielos sobre la tierra, engrandeció su misericordia sobre los que le temen. Salmos 130:3-4

Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana. Isaías 43:25

Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré de tus pecados. Isaías 55:7

Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar.Miqueas 7:18-19

¿Qué Dios como tú, que perdona la maldad, y olvida el pecado del remanente de su heredad? No retuvo para siempre su enojo, porque se deleita en misericordia. El volverá a tener misericordia de nosotros; sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados.Mateo 6:14-15

Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.Marco 11:25

Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.Lucas 6:37

No juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados. Lucas 7:47-48

Por lo cual te digo que sus muchos pecados le son perdonados, porque amó mucho; mas aquel a quien se le perdona poco, poco ama. Y a ella le dijo: Tus pecados te son perdonados. Lucas 24:46-47

Y les dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día; y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén. Hechos 3:19-20

 

Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio, y él envíe a Jesucristo, que os fue antes anunciado. Corintios 6:9-11

En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia, que hizo sobreabundar para con nosotros en toda sabiduría e inteligencia. Colosenses 1:13-14

El cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados. Juan 1:9

Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. Juan 2:1-2

Citas Bíblicas cortas para reflexionar

Esfuérzate y anímate, no temas, ni tengas miedo de ellos, porque el Señor va contigo, no te dejará, ni te desamparará. Deuteronomio 31:6

Todo lo puedo en Cristo que me fortalece», una frase que nos llena de esperanza y fortaleza en los momentos más difíciles. Filipenses 4:13

No los ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana, pero Dios es fiel, no los dejará ser tentados más de lo que pueden resistir, sino que, junto con la tentación, les dará una salida, para que puedan soportar. 1 Corintios

Los ojos de Dios contemplan toda la tierra, muestran su poder favoreciendo a los que tienen el corazón perfecto para con él. Crónicas 16:9

Esfuérzate y anímate, no temas, ni tengas miedo de ellos, porque el Señor va contigo, no te dejará, ni te desamparará. Deuteronomio 31:6

Todo lo puedo en Cristo que me fortalece», una frase que nos llena de esperanza y fortaleza en los momentos más difíciles. Filipenses 4:13

No los ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana, pero Dios es fiel, no los dejará ser tentados más de lo que pueden resistir, sino que, junto con la tentación, les dará una salida, para que puedan soportar. 1 Corintios

Los ojos de Dios contemplan toda la tierra, muestran su poder favoreciendo a los que tienen el corazón perfecto para con él. 2 Crónicas 16:9

Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis. Jeremías 29:11

Él da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ninguna. Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; pero los que esperan a Dios tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán. Isaías 40:29-31