Actualizado 17 mayo, 2021
La civilización azteca fue un gran pueblo mesoamericano que se estableció entre los años 1345 d.C y 1521 d.C, en el territorio centro y sur de la actual Ciudad de México. Los aztecas (o mexicas) fueron de las primeras civilizaciones precolombinas, con una cultura dominante de la región y alcanzaron su máxima expresión hasta el año 1521, luego del inicio de la guerra en contra de la conquista española.
Historia de la cultura azteca
Los aztecas, también conocidos como mexicas o tenochcas, fueron una de las civilizaciones más importantes de la época precolombina. Crearon la entidad político-territorial más grande y poderosa de la región, hasta el siglo XV, época en la que llegaron los conquistadores españoles y acabaron con esta civilización. El imperio azteca se ubicaba es lo que actualmente es la región centro sur del territorio mexicano.
Este gran y dominante imperio se levanto en solo 200 años, gobernó y colonizó toda la región central mesoamericana junto a los pueblos de Texcoco (acolhuas), Tlacopan (tepanecas) y México-Tenochtitlán. Esta última fue la capital del imperio azteca. Cada uno de estos pueblos tenia su propia vida política, social y religiosa bien organizada, pero en su conjunto conformaron una alianza que invadió y controlo a los pueblos vecinos, imponiendo su lengua y su religión.
Es por esta razón, que cuando llegaron al continente los conquistadores, les resulto sencillo convencer a las poblaciones de aliarse en contra de los aztecas. Al momento de la caída del imperio, el mismo contaba con aproximadamente 22 millones de personas y una densidad poblacional de 72,3 habitantes por kilometro cuadrado.
Ubicación de los aztecas
Los aztecas provenían de una tribu nómada que se asentó en México-Tenochtitlán (actual Ciudad de México) en el año 1325. Desde aquí comenzaron a expandirse colonizando los actuales estados de México, Veracruz, Puebla, Oaxaca, Guerrero, Chiapas (la costa), Hidalgo y parte del territorio actual de Guatemala. En esta región tenían variados ecosistemas, distintas regiones climáticas y esto significaba cantidad de recursos naturales que aprovechar.
Es así que hacia comienzos del siglo XVI, la civilización azteca que era gobernada por Moctezuma II, controlaban totalmente la región y había instalado su lengua (náhuatl) en casi toda Mesoamérica.
Características
El pueblo azteca era muy guerrero y religioso. Su dios principal era el Sol, llamado Huitzilopochtli. En nombre del mismo, como ritual, hacían sacrificios humanos, con los distintos guerreros capturados de las etnias conquistadas, a quienes además, los obligaban a abonar un sistema de impuestos que centralizaba en Tenochtitlán, la capital del imperio, la mayor cantidad de riquezas posible.
Sus vestimentas estaban adornadas con plumas y adornos que marcaban la jerarquía del individuo dentro de la sociedad. Además esta civilización tenía un gran dominio sobre la metalúrgica basada e el otro, la plata, la obsidiana y el bronce. Con dichos elementos creaban ornamentos y armas para la guerra.
Con respecto a la escritura, poseían un sistema métrico propio con el que desarrollaron grandes obras arquitectónicas y un sistema astronómico que se basaba en la observación del Sol, de la luna y de venus. Este gran imperio, heredó tendencias culturales de otras culturas anteriores como por ejemplo los teotuhuacanos, quienes crearon Teotihuacan un gran lugar religioso en donde realizaban ritos y ofrendas humanas en honor a sus dioses.
La civilización azteca adoraba las bellas artes, ya sea desde pequeños objetos grabados en miniatura hasta grandes templos de piedra. Utilizaron el arte como una manera de significar y de difundir su gran poder imperial, por ejemplos las famosas obras de la Piedra del Sol, la piedra de Tízoc y el trono de Motecuhzoma II, las cuales retrataban ideologías políticas aztecas relacionadas con los eventos cósmicos y con los dioses. Además se destacaron por la construcción de templos, como por ejemplo la pirámide del Templo Mayor.
La sociedad de los aztecas o mexica se dividía en veinte clanes o bien llamados calpullis, los cuales estaban relacionados entre si por parentesco, división territorial y practica religiosa. Cada uno de estos clanes tenía una autoridad, un territorio determinado y un templo propio, además se clasificaban a sus individuos en tres clases sociales:
–Nobles guerreros (llamados pipiltin): Eran quienes controlaban el gobierno y la religión del clan.
–Plebeyos (llamados macehualtin): esta clase incluía a los artesanos, a los campesinos y a los comerciantes pueblo llano.
–Esclavos (llamados tlatlacohtin): Por lo general eran los prisioneros de guerra, los criminales o determinados ciudadanos que pagaban a través de la servidumbre grandes deudas a terceros.
La sociedad de este pueblo se componía por castas que eran encabezadas por una nobleza sacerdotal, la cual también dirigía a la clase militar. El resto del pueblo era considerado plebeyo y realizaban las tareas más pesadas.
En cada uno de estos estados se ejercía la justicia local y administrativa a través de las instituciones que habían sido asignadas para ello. En caso de que existan problemas que no eran posibles de resolver, los mismos podían elevarse a los tribunales judiciales en México-Tenochtitlán y Texcoco. Aquí la justicia la impartía el palacio real por medio de sus autoridades. Por encima del Tecutli se encontraba un tribunal conformado por tres jueces vitalicios, los cuales eran designados por el asesor del ejecutivo, quien era un consejero de la máxima autoridad política del imperio: el huey-tlatoani (El mismo era electo entre la nobleza de los clanes de la sociedad por un consejo que era integrado por representantes de cada clan).
Economía azteca
La economía azteca fue muy prospera, en especial durante el apogeo imperial. Esto se debía al dominio que ejercían sobre los pueblos vecinos, sobre quienes obtenían una mano de obra barata y abundante.
El cultivo de las tierras era asignado a los clanes, quienes luego repartían la producción entre el Estado, los sacerdotes, las familias del clan y su respectivo jefe. Tenían grandes técnicas agrícolas y supieron aprovechar las aguas del lago Texcoco por medio de un sistema de cultivo denominado chinampas, el cual utilizaba el lodo del lago como abono y esto les permitía sembrar varias veces al año.
Los aztecas ejercían el comercio principalmente en forma de trueque, como también el tráfico de esclavos y las industrias mineras y textiles.
Religión de los aztecas
Los mexicas tenían una cosmovisión heredada de las culturas anteriores, organizada en torno a la veneración de un dios solar. Además tenían dioses propios de la cultura como fueron Tláloc, Tezcatlipoca o Quetzalcóatl.
Con el paso del tiempo y el crecimiento del imperio, aparecían nuevas deidades que eran veneradas y esto era gracias a que la expansión del imperio. Esto derivo en una religió llena de intrincadas y complejas historias de parentesco entre los dioses.
La religión de los aztecas era un elemento central dentro de su cultura. Ofrecían ritos de ofrenda a los dioses y ejercían sacrificios humanos (principalmente eran prisioneros de guerra).
Aportes importantes de la cultura azteca
La civilización azteca realizó importantes aportes a las civilizaciones que le siguieron. Entre los principales encontramos:
–El sistema de numeración: Crearon un sistema vigesimal basado en el conteo de unidades de 20 representadas mediante una serie de símbolos.
-El calendario solar: Crearon un calendario denominado Xihuitl que se basaba en 365 días del ciclo solar, dividido en 18 meses de 20 días cada uno y 5 días adicionales que eran destinados a actividades ceremoniales para recibir al nuevo año.
-La herbología medicinal: Realizaron grandes estudios de los atributos medicinales de las plantas y sus extractos.
-El cacao: Las semillas de cacao eran consideradas muy valiosas para los aztecas. Las utilizaban como moneda de intercambio y para preparar bebidas, entre otros usos.